Cada 12 de Octubre es anticapitalista, antifascista y antirracista:
Nada que celebrar… seguimos construyendo!
En el marco de un modelo socio económico que tiene crisis de superproducción y que ha extendido la miseria, los gobiernos de las multinacionales y los bancos han necesitado desarmar a los pueblos, echando por tierra conquistas laborales, sociales y democráticas que hasta hace pocos años fueron bandera de los gobiernos socialdemócratas. Privatizan instituciones, bienes públicos y beneficios, impulsando recortes sociales, mientras socializan las pérdidas, rescatando a la banca. Crean las condiciones, en el marco de esta crisis, para buscar como siempre un chivo expiatorio, “los inmigrantes”. Ese caudal humano sin el cual el crecimiento económico no fué ni será posible. La Ley de Extranjería y los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIEs) sólo son la expresión institucional de estas políticas.
Las multinacionales como Repsol, Endesa, Gas Natural-Unión Fenosa, el Banco Santander o Telefónica, con el respaldo de los estados nacionales, acumulan riqueza en los países del capitalismo periférico e impulsan de manera violenta un nuevo ciclo de expolio de los recursos naturales. La extracción de riquezas naturales que se inició con la conquista del continente ha sido permanente y sistemática, y se expresa hoy en la instalación de multinacionales de España, Catalunya y otros países, que no sólo extraen riquezas, sino que afectan directamente a comunidades indígenas, deterioran seriamente los ecosistemas naturales, y explotan a bajos costos la fuerza de trabajo de nuestra América, en nueva forma de colonialismo.
En este escenario de imposición del capitalismo neoliberal, son las mujeres uno de los sectores más afectados por la desocupación, la precarización del empleo y la pobreza. Si bien son las mujeres las principales afectadas por las crisis cíclicas del capitalismo y por el deterioro económico y ambiental, son también quienes luchan y resisten desde los ámbitos doméstico, social y político.
A pesar de que el capitalismo asume formas políticas “democráticas” en la mayoría de los países de nuestra América, la represión a las diversas formas de resistencia y la criminalización de las luchas sociales se extienden en la región. Comunidades expulsadas de sus territorios, persecución, allanamientos, amedrentamientos, prisión y exterminio, son algunas de las respuestas de los estados a los/as que luchan.
A pesar de todo, hoy, seguimos aquí. A pesar de las ansias de homogeneización, de acabar con nosotras/os, con nuestras culturas y proyectos políticos, con nuestra dignidad…, nosotras/os seguimos vivas/os. Vivas/os y combativas/os. Las luchas de los pueblos indígenas, las movilizaciones de rechazo a los proyectos de las multinacionales, la resistencia frente a los golpes de estado o gobiernos autoritarios, la ocupación de fábricas, las propuestas desde la música y el arte, son sólo algunos ejemplos de esta firmeza.
Las organizaciones, colectivos y activistas que formamos parte de la Plataforma por otro 12 de octubre denunciamos el expolio de la multinacionales, el terrorismo de estado que reprime y encarcela a los/as que luchan, y expresamos nuestro rechazo al carácter festivo con que se conmemora cada 12 de octubre en el estado español y en casi todos los países de América.
Cada 12 de octubre se celebra una conquista político-militar que implicó el exterminio de más de 80 millones de personas, el establecimiento de una jerarquía racial, la esclavitud tanto de los pueblos originarios como de pueblos traídos de las lejanas tierras de África y de China y la consolidación de estructuras racistas que perduran hasta hoy. Se celebra una conquista que destruyó culturas autóctonas y formas de organización no mercantil con el objetivo de llevar adelante el expolio económico y el sistemático despojo de los recursos naturales. Se consolidó entonces un sistema colonial, que luego de diversos procesos históricos de dominación y de lucha en la región, se expresa hoy en las políticas neoliberales.
No. No tenemos nada que festejar. Los costos fueron muy altos y los beneficios se los fueron quedando, muy pocos… No, no hay nada que celebrar, cuando la imposición de los estados como forma política requerida por el capitalismo ha implicado la imposición de un proyecto homogeneizador de las diferentes naciones y culturas, negando sistemáticamente el derecho a la autodeterminación de los pueblos.
En Madrid, cada 12 de octubre, el estado español hace desfilar al ejército, para hacernos recordar que lo que no logra con la razón ni la justicia, lo mueve a través de la fuerza. Los acuerdos diplomáticos que promueven la participación de muchos países latinoamericanos en este desfile militar es parte de la desmemoria que se ha impuesto. Todo intento de rescate de la tradición de lucha de los pueblos es reprimido.
Celebramos, desde una memoria viva, de construcción colectiva y el caminar constante de un proyecto permanentemente creativo desde las y los de abajo en todas partes del mundo.
¡Por un 12 de octubre anticapitalista, antifascista y antirracista!
¡Por las luchas compartidas, la solidaridad y la ternura entre los pueblos!
Plataforma por otro 12 de Octubre. Barcelona
¡¡¡Por una Abya Yala libre!!!
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